Los primeros coleccionistas de libros fueron Pisístrato, Polícrates de Samos, Platón, Eurípides, Jenofonte, Eutidemo, Euclides, Isocrates y Aristóteles. En el 330 a. de J.C. fue establecida la primera biblioteca pública en Atenas, con el fin de que fueran aprovechados los originales «cuidadosamente confeccionados» de las obras de los trágicos Esquilo, Sófocles y Eurípides. En el siglo iii a. de J.C. recibieron notable incremento las bibliotecas tanto públicas como privadas.