(1478-1534). Papa en 1523-34, perteneciente a la familia de los famosos Medici de Florencia. Hombre culto y afable, fue totalmente incapaz de resolver los grandes problemas espirituales y temporales de su pontificado. Aliado con Francisco I de Francia en su lucha contra Carlos I (v. Carlos I) provocó la marcha de éste contra Roma (1527), con el subsiguiente saqueo de la ciudad y detención del Papa en el castillo de Sant’Angelo. Clemente se vio obligado a firmar una paz humillante con el Emperador y a presidir su coronación imperial en Bolonia. Por su parte, Enrique VIII se rebeló contra su autoridad espiritual al negarse Clemente a consentir en su divorcio con Catalina de Aragón. Clemente, desbordado por todas partes, se vio incapaz de cortar el avance de las doctrinas disidentes: el luteranismo en Escandinavia, el calvinismo en Francia y el zwinglianismo en Suiza. Aunque su diplomacia fuera vacilante y su gobierno débil, en su vida privada se reveló intachable y deseoso de corregir abusos. Fue el protector de Benvenuto Cellini, Rafael y Miguel Ángel. A sus instancias se emprendió el fresco de El juicio final de la Capilla Sixtina.