"Éfeta" era el título que recibían ciertos jueces en la antigua Atenas. Estos magistrados tenían la responsabilidad de impartir justicia y resolver conflictos legales en la sociedad griega. Es importante diferenciar esta figura de los "efetá", otro término relacionado pero con significado distinto. Los éfetas desempeñaban un papel crucial en el sistema judicial de Atenas, contribuyendo a mantener el orden y la equidad en la ciudad.