El Naturalismo y el Fascismo en la literatura alemana del siglo XVIII surgieron como respuestas a la industrialización tardía pero acelerada en Alemania. El movimiento naturalista, influenciado por el impresionismo francés y la novela experimental de Zola, se caracterizó por un determinismo rígido en autores como Heinrich y Julius Hart, Holz y Schlaf. Gerhart Hauptmann, destacado dramaturgo, combinó elementos neorrománticos en sus obras. Por otro lado, poetas como Liliencron y Richard Dehmel aportaron una poesía vital al periodo, mientras que Schnitzler, Hofmannsthal, Rilke y Stefan George exploraron el drama y la poesía impresionista sensitiva.
Naturalismo y Fascismo (Literatura Alemana)
El tardío pero acelerado desarrollo de la industria alemana encuentra sólo una tímida reacción en la literatura.
El movimiento naturalista alemán del siglo xviii fue un débil eco del impresionismo francés y de la «novela experimental» de Zola. En Heinrich y Julius Hart, Holz y Schlaf se mantuvo en un rígido determinismo, compensado por obras de gran fantasía estructural.
Su más representativo dramaturgo, Gerhart Hauptmann, derivó así de sus Tejedores a los temas neorro-mánticos. Sin embargo, en Liliencron y especialmente en Richard Dehmel, el periodo produjo poesía vital; y en Schnitzler y Hofmannsthal, Rilke y Stefan George, drama y poesía sensitiva impresionista.
La época de la I Guerra Mundial presenció el repentino auge y caída del expresionismo (Wedekind, Kaiser, Toller), en gran parte por influencia del filósofo Nietzsche.
El expresionismo, más militante que el naturalismo, era, por otra parte, más informal e impaciente.
El hitlerismo lanzó a la mayor parte de los escritores renombrados al exilio (Thomas Mann, Heinrich Mann, Werfel, Dóblin, Feuchtwanger, Becher, Friedrich Wolf, Graf, Seghers, Arnold Zweig, Stefan Zweig, Toller, Bruckner, Bretch, Hesse, Unruh). Tras la II Guerra Mundial algunos han regresado a su tierra natal.
El Naturalismo y el Fascismo en la literatura alemana tuvieron un impacto significativo en el desarrollo y la evolución de la escritura en el país.
El movimiento naturalista alemán del siglo XIX se caracterizó por su enfoque en retratar la realidad de manera objetiva, utilizando observaciones científicas y experimentales. Estuvo influenciado por el impresionismo francés y las novelas experimentales de Émile Zola. Algunos de los escritores más destacados de este movimiento fueron Heinrich y Julius Hart, Holz y Schlaf, quienes mantuvieron una perspectiva determinista en sus obras, aunque también incorporaron elementos de fantasía estructural.
Uno de los dramaturgos más representativos del naturalismo alemán fue Gerhart Hauptmann, cuya obra "Los tejedores" mostraba los problemas sociales y las condiciones de vida de los trabajadores. Sin embargo, también se pueden encontrar temas neorrománticos en sus obras. Otros escritores importantes de este período fueron Liliencron, Richard Dehmel, Schnitzler, Hofmannsthal, Rilke y Stefan George, quienes exploraron la poesía vital y el drama sensitivo impresionista.
La época de la Primera Guerra Mundial fue testigo del surgimiento y el declive repentino del expresionismo en la literatura alemana. Escritores como Wedekind, Kaiser y Toller adoptaron un tono más militante en sus obras, influenciados en gran parte por la filosofía de Nietzsche. El expresionismo se caracterizaba por su informalidad y su impaciencia, y buscaba expresar las emociones y los estados de ánimo intensos.
El ascenso del fascismo en Alemania, representado por el régimen de Hitler, tuvo un impacto profundo en el mundo literario. Muchos escritores destacados tuvieron que exiliarse debido a su oposición al régimen, incluyendo a Thomas Mann, Heinrich Mann, Franz Werfel, Alfred Döblin, Lion Feuchtwanger, Johannes R. Becher, Friedrich Wolf, Lion Feuchtwanger, Arnold Zweig, Stefan Zweig, Ernst Toller, Gottfried Benn, Bertolt Brecht, Hermann Hesse y Fritz von Unruh. Estos escritores, llevados por el exilio, continuaron su trabajo en otros países mientras el nazismo estaba en el poder. Algunos de ellos regresaron a Alemania después de la Segunda Guerra Mundial, aunque otros quedaron marcados por el trauma de la época y optaron por no regresar a su tierra natal.
En resumen, el naturalismo y el fascismo en la literatura alemana estuvieron marcados por el desarrollo industrial tardío pero acelerado y por el impacto de movimientos artísticos como el impresionismo francés y el expresionismo. Estos movimientos permitieron a los escritores explorar nuevas formas de representar la realidad y expresar sus emociones y perspectivas, aunque también fueron influenciados por las condiciones políticas y sociales de la época, como el surgimiento del fascismo y el exilio de muchos escritores renombrados.
