Abrasarse es un verbo reflexivo que se utiliza para describir diferentes situaciones relacionadas con el calor y el fuego. Puede referirse a quemarse o consumirse en fuego, como cuando un campo se abrasa por un incendio. También se emplea para expresar la sensación de sentir mucho calor, como en la frase "me estoy abrasando con este calor". Por último, se utiliza para indicar la acción de deshidratarse o desecarse, como cuando una cosecha se abrasa por falta de lluvias.