historia: desarrollo de cohetes a mediados el siglo xx
La labor iniciada por von Braun en Peenemünde, ha continuó acelerado en veloz carrera contra el tiempo. Estados Unidos, Rusia, Inglaterra, Francia y otras naciones —hasta la pacífica Suiza— se superaban cada día en la tarea de aplicar el principio de autopropulsión a la creación de nuevos ingenios. La ciencia militar clasificaba estos ingenios autopropulsados, atendiendo a su origen y destino, en varías categorías: superficie-superficie, superficie-aire, aire-superficie, aire-aire, aire-profundidades marinas, profundidades marinas-aire, balísticos intercontinentales, contracarros y misiles-antimisiles, clasificación que adoptaremos, incluyendo los de exploración científica, para englobar con cierto orden la innúmera cantidad de proyectiles cohetes que han proliferado durante la última década.
