Una corriente alterna con un valor máximo de un amperio no es tan efectiva como una corriente continua de un amperio. Al medir la corriente alterna, el sistema más conveniente es aquél en el que un amperio de corriente alterna producirá el mismo calor en una resistencia que el que causaría un amperio de corriente continua. El calor obtenido de I2R es el mismo, cualquiera que sea la dirección de la corriente. Así, pues, el valor de la corriente es tal que si se eleva al cuadrado y se multiplica por la resistencia, dará el promedio de caldeo; y este valor será la raíz cuadrada del valor medio del cuadrado de la corriente (media geométrica). Si la media geométrica de la corriente es un amperio, la corriente producirá el mismo calor en una resistencia determinada que un amperio de corriente continua. Si se mide la corriente por la atracción de dos arrollamientos de cable (solenoides), a través de los cuales aquélla fluye, la atracción es proporcional al cuadrado de la corriente y la atracción media de un arrollamiento sobre el otro es proporcional a la media cuadrática de la corriente. La raíz cuadrada de esta fuerza es, por tanto, una medida de la media geométrica de la corriente y se puede decir que la corriente tiene un valor en amperios equivalente al de la corriente continua que produce el mismo empuje. Los amperímetros de corriente alterna están graduados de forma que dan directamente el valor medio de la corriente. De la misma forma, la f.e.m. media se obtiene como equivalente de la f.e.m. de corriente alterna. Un voltímetro electrostático facilitará datos que dependerán de la media geométrica de la f.e.m.; las lecturas de tales instrumentos se toman como correspondientes a la fuerza electromotriz equivalente. Tales valores se miden en voltios o amperios efectivos.
