Diez oraciones con la palabra «codiciar» y derivadas (por ejemplo: codician, codiciaban, codicia) seleccionadas de refranes, poesías, cuentos y artículos de interés general.
Las siguientes oraciones fueron seleccionadas por ser oraciones cortas, por su sencillez o porque están orientadas a escolares; así pueden ser entendidas por niños y adolescentes.
Oraciones con «codiciar» para escolares
• « Su talento para la música es codiciado por varias orquestas. »
• « Los blancos estaban especialmente resentidos con los cherokees de Georgia, pues codiciaban las ricas tierras agrícolas de la tribu en el norte del estado. »
• « Como se ha señalado anteriormente, había muchos productos lucrativos (como el oro y el marfil) que los europeos codiciaban y que sólo podían obtener de los comerciantes del Norte de África. »
• « La incursión turística en el mar también comprende una visita a los reservorios vegetales naturales entre los que se destaca el del tan codiciado coral rojo. Por último, también visitará uno de los hábitats ecológicos de mayor interés, un arrecife artificial cuya contemplación será, en todo sentido, el punto culminante del paseo. »
• « La televisión fue un instrumento altamente codiciado por sus potencialidades: era un medio privilegiado para extender la cultura, la educación y la información; permitía unir a cada ser humano con el resto de los habitantes del mundo. Se alcanzaba la universalización de la cultura pregonada siglos atrás, cuando se creó la imprenta. »
¡Hola! Me preguntaba si podrían modificar el texto "Oraciones sencillas de codiciar", tal vez podrían agregar más ejemplos o explicar un poco más el significado de la palabra. ¡Gracias!
Respuesta
Claro, aquí te dejo algunas oraciones sencillas con la palabra "codiciar":
1. No está bien codiciar lo que es de los demás.
2. A veces es difícil no codiciar lo que tienen los demás.
3. Es mejor no codiciar riquezas que no se pueden obtener de manera honesta.
4. El deseo de codiciar algo puede llevar a cometer actos ilegales.
5. No hay que dejarse llevar por la tentación de codiciar lo que no nos pertenece.