• « El mecanismo que discurrió para mejorar el kinetoscopio tenía dos ventajas: no sólo evitaba los saltos de la imagen de la película, sino que permitía que cada cuadro se detuviera brevemente frente a la fuente de luz, lo que producía imágenes mucho más nítidas. Hoy en día este dispositivo se sigue utilizando en las cámaras y en algunos proyectores. »