El texto habla de una persona joven que tiene dificultades para mover su cuerpo y comunicarse. Cuando los jóvenes se acercan a él para decirle algo, él usa dos dedos de una mano para escribir su respuesta en una computadora que tiene en su regazo. Luego, una máquina convierte las palabras escritas en voz. La respuesta que da suena metálica y hace reír a las personas que están comiendo con él.