En este texto se nos dice que un hombre llamado Titov, que era ruso, fue identificado como general de la KGB, que es una agencia de inteligencia de Rusia. Debido a esto, las autoridades noruegas decidieron declararlo "persona non grata", lo que significa que ya no era bienvenido en Noruega. A partir de ese momento, la agencia de seguridad de Noruega comenzó a ser más vigilante, es decir, a prestar más atención y a ser más cuidadosa en su trabajo.