Abad es un título que se otorga al superior de una abadía o monasterio con doce o más monjes. Existen dos tipos de abades: el mitrado, que tiene derecho a usar mitra, y el honorífico, designado para presidir un cabildo catedralicio. En Argentina, se utiliza para referirse a un cura, sacerdote o párroco de una iglesia. Antonio Abad, nacido en Egipto en el año 251, fue un monje cristiano y fundador del movimiento eremítico. Su vida, transmitida por san Atanasio, lo presenta como un modelo de santidad para los cristianos, con elementos históricos y legendarios. Se celebra su festividad el 17 de enero en Oriente y Occidente.
(Abad, Antonio). Nacido en Heracleópolis Magna, Egipto, 251, muerto en Monte Colzim, Egipto, 356. Monjecristiano, fundador del movimiento eremítico.
El relato de su vida, transmitido principalmente por la obra de san Atanasio, presenta la figura de un hombre que crece en santidad y lo convierte en modelo de cristianos. Tiene elementos históricos y otros de carácter legendario.
Festividad 17 de enero (Oriente y Occidente).
Sus apodos: Egipcio, el Grande, Ermitaño
Etimología u origen de la palabra abad: Del latín abbas, éste del griego αββα, y éste del arameo abbā, padre, enlazando su significado original con la paternidad de Cristo.
Segundo diccionario: abad
m. Superior de un monasterio o colegiata.
Dignidad en los antiguos cabildos de algunas catedrales.
Dábase también este nombre a los que usaban hábito eclesiástico, como los sacerdotes o estudiantes de las universidades.
Nombre que dan al cura en algunas provincias del N de España.
Eclesiástico que preside un cabildo.
Nombre que se da al Hermano mayor en algunas cofradías.
Persona lega que por derecho de sucesión posee una abadía con frutos secularizados.
Abadejo, insecto muy parecido a la cantárida.
—bendito. El que ejerce jurisdicción casi episcopal. Ver: abad bendito
—de oratorio. Título del archicapellán del palacio de la antigua corte real de Francia. Ver: abad de oratorio
—ecuménico. Título que se dio a algunos monjes griegos. Ver: abad ecuménico
—exento. El independiente del obispo, sometido solamente a la jurisdicción papal. Ver: abad exento
—mitrado. El que usa o puede usar insignias episcopales. Ver: abad mitrado
El abad de San Elpidio. El que, no teniendo ocupación alguna, espera siempre colocarse en situación encumbrada y lucrativa, sin obtenerla jamás.
Como canta el abad, responde el monacillo, o responde el sacristán, ref. que indica que los súbditos se ajustan al proceder de los superiores.2º artículo
Superior de un monasterio, cenobio o colegiata. Dícese exento el independiente de la jurisdicción episcopal; in partibus, el titular de una abadía situada en tierra de infieles; mitrado, el que tiene categoría episcopal, como el del monasterio benedictino de Silos (España). Originariamente se aplicó el nombre como título honorífico a un monje distinguido o bien anciano hasta que su uso quedó restringido al superior de la comunidad. El título correspondiente en la Iglesia Oriental es el de archimandrita o hegúmenos. Las órdenes fundadas en Occidente después del siglo xi designaron a sus superiores no con el nombre de abades, sino con el de priores, guardianes o rectores.
El abad puede ser elegido con carácter vitalicio u, ordinariamente, por tres años; ha de tener al menos 30 años y ser sacerdote. La elección es efectuada por los monjes profesos ordenados y es confirmada por el obispo o, en el caso de monasterios exentos, por el abad superior o por el Papa. El abad recibe Consagración solemne de manos del obispo. Tiene el poder de facultar a los sacerdotes para la remisión de los pecados; en asuntos graves necesita el asentimiento de la comunidad religiosa. Puede regir una casa o varias; ser independiente de la jurisdicción episcopal —como en el caso del abad exento— y depender directamente del Papa; o puede poseer jurisdicción episcopal sobre una zona determinada o —como el mitrado— tener derecho a las insignias episcopales.
Abades comendatorios se decía de las personas que poseían una abadía con frutos secularizados o que, sin ser necesariamente monjes, disfrutaban sus rentas. Nombrados en un principio, en épocas turbulentas, como protectores de los monasterios, recibieron después tal título como prenda del favor real. De aquí proviene el título francés de cortesía abbé o el italiano abbate, aplicado a clérigos seculares sin vivienda eclesiástica o Beneficio.