Profeta de Israel que vivió en los primeros años de la restauración subsiguiente al cautiverio babilónico. Aunque éste tuvo lugar el 536 a. de J.C., la construcción del templo se vio demorada hasta el 520, en que Ageo instó a Yehosua y Zorobabel a que comenzasen la obra sin más dilaciones. En su misión anunció que el hambre que se extendía sobre la Tierra se debía al enojo de Dios con los excautivos, que adornaban sus casas mientras la de Dios continuaba inacabada. Prometió que el nuevo templo sería más célebre que el antiguo, no por sus riquezas, sino por la presencia del Mesías, el «deseado de todas las gentes», que predicaría en él el Evangelio de la paz (Ag. 2:8).