(759-842). Rey de Asturias y León, hijo de Fruela I, que, alejado de la corte por sus parientes (al parecer encerrado en un monasterio), subió al trono en el 791 por abdicación de su primo Bermudo I y prosiguió con buen éxito las campañas de su padre y abuelo. Trasladó la Corte a Oviedo, restableció la legislación visigótica y venció a los árabes en Lutos. Durante su reinado fue descubierto el sepulcro del apóstol Santiago en Compostela. Con la oposición de los magnates —Bernardo del Carpió entre ellos, según la leyenda— pactó una alianza con el emperador Carlomagno.