m. Planta perenne de tallos leñosos y ramas desde la base.
Origen etimológico de arbusto: proviene de la palabra latina arbustum.
Segundo diccionario: arbusto
Origen de la palabra: (del latín arbustum.)
m. Planta perenne, de tallos leñosos y ramas desde la base.2º artículo
Planta perenne de tallos leñosos cuya altura no llega a 6 m y sin tronco principal. Los jardineros utilizan los arbustos por su belleza individual, por su valor decorativo en macizos o para que sirvan de pantallas o refugios. Arbustos típicos son las lilas, jeringuillas, rododendros, laureles, bérberos, viburnos y las rododafnes. Al plantarlos puede seguirse uno de estos dos procedimientos: espaciar las plantas lo suficiente como para permitir su crecimiento durante varias estaciones o plantarlas algo más próximas y recortar parte de ellas cuando empiezan a tocarse. Hasta que los arbustos ocupen todo el espacio pueden adornarse los bordes con bulbos en primavera y plantas anuales en verano. Apenas requieren poda; si son fanerógamas únicamente es preciso eliminar en invierno las partes viejas y agotadas. La poda debe realizarse siempre a cuchillo, pues las podaderas desfiguran las hojas. Entre los arbustos fanerógamos que merecen especial mención están la Magnolia stellata la M. conspicua, las azaleas, los rododendros, los codesos, los almendros floridos, los ciruelos, los melocotoneros y los cerezos, el Pyrus japónica, el Philadelphus coronarias, el P. aureus, el grosellero florido, las lilas, Forsythia suspensa, Choisya ternata, Weigela grandiflora, los bérberos y la Hydrangea paniculata.
