Filósofos griegos de la escuela pitagórica, célebres como prototipos de la amistad fraterna que vivieron en Siracusa en tiempo de Dionisio el Joven. Condenado Pitias a muerte por el tirano bajo la acusación falsa de haber conspirado contra él, solicitó licencia para arreglar sus asuntos antes de morir, licencia que le fue concedida con la condición de que Damón, que se había ofrecido como rehén durante su ausencia, habría de morir por él si no regresaba en la fecha señalada. Pitias se presentó con el tiempo justo de evitar la muerte de su amigo. El tirano quedó tan impresionado por este heroico alarde que no sólo perdonó a ambos amigos, sino que solicitó su amistad.