Se encuentran depósitos que van desde el Precámbrico a los tiempos actuales, con distribución y estructuras complejas. Están muy extendidas las rocas intrusivas, particularmente en el O, donde abunda el granito mesozoico, al igual que en las Montañas de Columbia y Cassiar-Omineca. El vulcanismo miocénico dejó extensos mantos de lava en la zona centro-sur. Las mesetas interiores están formadas principalmente por rocas paleozoicas y cretáceas. Las Montañas Rocosas, originadas por sedimentación, han sufrido plegamientos y fallas de gran intensidad. Las tierras bajas del NE están formadas por sedimentos cretáceos casi inalterados. Toda la provincia estuvo sometida a glaciación durante el Pleistoceno.