La rigurosidad significa ser muy estricto y no permitir errores.
Por ejemplo, un maestro riguroso es aquel que exige que los alumnos sigan todas las reglas y hagan todo perfectamente.
También implica ser muy disciplinado y seguir las normas al pie de la letra.
Por ejemplo, un científico riguroso seguirá cuidadosamente cada paso de un experimento para obtener resultados precisos.
La rigurosidad asegura que los resultados sean exactos, coherentes y confiables.
Por ejemplo, un contador riguroso revisará cada cifra con detenimiento para evitar errores en los cálculos.
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NOTA: Esta explicación sencilla se generó a partir de nuestra definición, pero usando IA; puede contener alguna imprecisión.
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