El texto compara la adolescencia con un mar. Dice que dentro de ese mar hay peces de muchos colores, lo que significa que hay muchas experiencias y emociones diferentes. Pero también hay "pulpos" a veces, que representan las dificultades y problemas que pueden hacernos sentir confundidos y perdidos. A pesar de todo, el autor sugiere que podemos superar estas dificultades y salir adelante.