En este texto, se menciona a una persona llamada Edsel que estaba herida. No se refiere a una herida física, sino a una herida emocional o espiritual. Se dice que su alma sangraba, lo cual significa que estaba sufriendo mucho por dentro. Walter Reuther, otra persona que conocía a Edsel, recuerda que era una persona buena y se preocupaba mucho por los demás. A Walter le daba lástima ver a Edsel sufrir de esa manera.