Las siguientes oraciones fueron seleccionadas por ser oraciones cortas, por su sencillez o porque están orientadas a escolares; así pueden ser entendidas por niños y adolescentes.
• « Llevo mucho tiempo practicando deporte y, aunque no soy una gran atleta, me siento orgullosa de mi constancia y dedicación, por lo que agradezco el elogio de mi entrenador. »
• « El cineasta creativo dirigió una película que cautivó al público y recibió elogios de la crítica por su originalidad y su estilo visual impresionante. »
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Oraciones con «elogio» de textos seleccionados
• « Al comprender de repente que la palabra "mula" era un elogio, y no un insulto, Bourguiba fue en persona a poner en libertad al hombre que lo había vitoreado en forma tan extraña. »
• « Que anhelaba mucha atención y elogio, que era fácil causarle un trauma emocional y que se ponía tensa en los exámenes trimestrales y generales, en que obtenía tan triunfantes resultados. »
• « El elogio que más le complace es el de sus amigos aborígenes los tirios. Koita, un joven que ha trabajado con él lo suficiente para aprender un poco de inglés, dice simplemente: "Mark escucha". »
• « Con demasiada frecuencia subestimamos el poder de una caricia, una sonrisa, una palabra amable, un oído atento, un elogio sincero, y de las más sencillas muestras de interés. Pero todo ello es capaz de cambiar una vida. »
• « ¿Son moralmente dignos de elogio los funcionarios británicos que proscribieron esta práctica por imponer una norma externa a los habitantes nativos de la India y perturbar su capacidad de cumplir las expectativas sociales sagradas? »
• « Un reseñador comparó al libro "Breve historia del tiempo" con el libro "El budismo zen y el arte de dar mantenimiento a las motocicletas", una obra esotérica que fue todo un éxito en los setentas. Hawking interpretó esto como un elogio, como una clara señal: había llegado al público que le interesaba. »
• « Al cabo de un tiempo, cuando sus libros cobraron fama y empezaron a buscarlo algunos literatos, académicos y políticos de renombre, mostró ante los elogios la misma indiferencia que antes había manifestado ante el rechazo. »
• « ¡Un charlatán! No es feliz hasta que no sabe la razón de todo, e incluso cuando lee se interrumpirá cien veces para hacer una u otra pregunta. Pero a mí, en cambio, que estoy siempre callada, que no me muevo, que no levanto los ojos del libro ni del trabajo, la señora profesora no piensa nunca: ¡y todos los cumplidos y los elogios son para Argene!" »
