Las frutas y verduras presentan menos problemas de conservación en cámaras que las carnes. Muchas de ellas, sin necesidad de llegar a la congelación, admiten un largo almacenamiento. Algunas frutas, como las manzanas y las peras, se conservan hasta seis meses sin grave deterioro entre 0o y —1 °C. Los melocotones, en cambio, no resisten más de un mes la cámara fría. Las temperaturas moderadamente bajas no ejercen efectos deletéreos en la mayoría de las frutas y productos hortícolas, con la excepción de los plátanos, que no resisten temperaturas inferiores a 13 °C sin sufrir grave quebranto en el proceso de maduración.