Cap. del dist., prov. y dep. homónimos (Perú), a orillas del Chili y al pie del imponente Misti, con 869 351 h (2015), que la sitúan en segundo puesto entre las poblaciones peruanas.
Situada a 2300 m de altitud, en una amplia campiña entre la costa y la altiplanicie andina, participa de las características climatológicas de ambas regiones. Además del nevado Misti se alzan en sus proximidades otros dos volcanes: el Chachani y el Pichupichu. Arequipa disfruta de un clima incomparable, casi una primavera perpetua, con una media de 16 °C, casi sin oscilaciones térmicas (apenas 4 °C). En el mismo valle (70 km de diámetro) se encuentran también otras poblaciones pintorescas: Yanahuara, Caima, Paucarpala, Socabaya, Miradores, Sachaca, Characao, etc., que ofrecen gran interés turístico. Algunos de ellos poseen bellas iglesias del siglo xviii. En las proximidades de Arequipa se localizan también los famosos baños de aguas frías y termales de Jesús, Yura y Tingo, que, además de ser importantes centros de veraneo para los habitantes de la región, atraen anualmente numerosos visitantes de todo el país.
La leyenda atribuye la fundación de la ciudad a algunos guerreros de Huayna Cápac que, en su camino de regreso a Cuzco tras una expedición bélica, decidieron asentarse en paraje tan delicioso. Los españoles levantaron sobre el poblado indígena la ciudad de Villa Hermosa (1540) y la poblaron en unión de los indígenas, con los que formaron una familia fuerte, unida y tenaz, que no se resignó a abandonar la ciudad tras los terremotos de 1582 y 1687, sino que la reconstruyó casi totalmente.
Una ventaja supuso la destrucción de la ciudad a raíz del último terremoto: que fue reconstruida en un periodo relativamente breve, por lo que presenta una sorprendente unidad de estilo, a la que contribuyen además el temor a los terremotos (escasean las casas de más de un piso) y el empleo casi general de la piedra blanca procedente de las canteras del Misti. Paso obligado de los aventureros que se adentraron en la altiplanicie andina en busca de metales y piedras preciosas, su saludable clima atrajo a muchos de ellos, que, al volver enriquecidos, se establecieron en Arequipa y la embellecieron notablemente.
Algunas familias notables asentadas en la ciudad levantaron en ella sus casas solariegas, que hoy resultan importantes monumentos artísticos; entre ellas destacan las de los Cossío, Moral, Quiroz e Irriberry, construidas todas ellas entre 1730 y 1800.
Pero lo verdaderamente notable de la ciudad son sus bellas iglesias de tiempos de la colonización: San Agustín, Santa Catalina, Santo Domingo, San Francisco, La Merced, erigidas todas ellas con la blanca piedra sillar de las canteras próximas. El templo de la
Compañía de Jesús ofrece a la admiración una fachada de estilo barroco español (1690). La Catedral, situada en la Plaza Mayor, fue construida inicialmente en estilo colonial, pero resultó totalmente arrasada por el incendio de 1844. Reconstruida posteriormente en estilo clásico, constituye hoy uno de los más bellos templos de los países andinos.
Las avenidas de Parra, Jorge Chávez, G. M. Castilla y del Ejército son las principales arterias de la villa, que posee además hipódromo, campo de deportes, etc. En el parque de Selva Alegre se alza el Hotel Arequipa, construido bajo el patrocinio del Gobierno peruano para albergar a los numerosos turistas que visitan la región.
La ciudad, lugar de tránsito desde la costa al interior y a Bolivia, cuenta con excelentes comunicaciones. La línea férrea que parte de Moliendo y atraviesa Arequipa y Juliaca aprovecha el Paso de Puno para penetrar en Bolivia hasta la Paz. No menos importancia tiene como nudo de carreteras, y la más importante la pone en comunicación con Bolivia aprovechando también la vía de Puno y el lago Titicaca. La ciudad, centro comercial e industrial del valle, tiene salida al mar por el puerto de Moliendo, del que dista 172 kilómetros.
Importante centro cultural peruano, Arequipa cuenta con la Universidad Nacional de San Agustín y Facultades de estudios superiores, además de ser sede de numerosos centros culturales y científicos. Entre sus sociedades recreativas destacan el Golf Club, Centro militar, Club Internacional, Club Hípico Los Orillos, etc. Arzobispado desde 1943, tiene como sedes sufragáneas las de Tacna y Puno. Es cabeza de región militar. En sus proximidades se encuentra la base aérea de Vítor.
Actualizado: 23/02/2015
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