(1638-1705). Reina consorte de Inglaterra, nacida en Villa Vinosa (Alemtejo, Portugal). Hija de Juan IV de Portugal, casó en 1662 con Carlos II de Inglaterra, pero no vivió con él. Con este matrimonio buscaban los portugueses el apoyo inglés contra España a cambio de ciertos privilegios comerciales. Catalina se atrajo la enemistad del Parlamento por su condición de católica y el propio Carlos hubo de intervenir en su defensa cuando fue acusada por Titus Oates de intento de regicidio. A la muerte de su esposo (1685) se retiró a un convento, de donde salió para regresar a Portugal al ascender al trono Guillermo III (1692).