Corpóreo (corpórea) deriva del latín "corporeus", que alude a "que tiene cuerpo". Se emplea para referirse a aquello vinculado a un cuerpo físico, palpable y material, en contraposición a lo espiritual, abstracto o inmaterial.
Se aplica tanto a seres vivos como a objetos inanimados, siempre y cuando estos ocupen un espacio físico y puedan ser percibidos por los sentidos.
En el ámbito de las ciencias, especialmente en la física y la biología, el término corpóreo se refiere a cualquier entidad que tenga masa y volumen.
En filosofía, por otro lado, se utiliza para discutir la naturaleza del ser y la existencia, diferenciando entre aspectos corpóreos y aspectos espirituales o mentales del ser.
En el arte y la literatura, lo corpóreo puede explorarse como tema o concepto, enfocándose en la representación de la forma física humana o de otros cuerpos materiales. Aquí, lo corpóreo se convierte en un medio para explorar temas más amplios de identidad, existencia y experiencia sensorial.
Ejemplos de uso: "La escultura, con su énfasis en lo corpóreo, captura la esencia de la forma humana".
"En su última novela, el autor explora la relación entre el alma y el aspecto corpóreo del ser".
"Los científicos estudian cómo las fuerzas actúan sobre objetos corpóreos en el espacio".
"La danza es una expresión artística que celebra el movimiento y la belleza del cuerpo corpóreo".
"La medicina se ocupa principalmente de curar el aspecto corpóreo del individuo, aunque también considera su bienestar emocional y mental".
"En la física, la materia corpórea se distingue de la energía por tener masa y ocupar un espacio".
"La filosofía analiza cómo nuestra percepción del mundo corpóreo influye en nuestro entendimiento de la realidad".
Origen etimológico de corpóreo: proviene de la palabra latina corporĕus
