Halagar es un verbo que implica expresar afecto, admiración o reconocimiento hacia otra persona. Al halagar a alguien, se le brindan muestras de aprecio y se valoran sus cualidades o acciones de forma positiva. También puede significar proporcionar satisfacción o orgullo a alguien, generando una sensación de vanidad. En ocasiones, halagar puede ser sinónimo de adular, elogiando excesivamente con el objetivo de obtener beneficios personales. En un sentido figurado, halagar se refiere a causar placer o deleite, generando una respuesta positiva en quien lo experimenta.
Cuando algo halaga a una persona, le proporciona un sentimiento de satisfacción, orgullo o vanidad. Puede ser una situación, un cumplido o cualquier acción que genere una sensación positiva en quien recibe el halago.
Ejemplos de uso: "El reconocimiento público por su labor en la organización fue un gran halago para él".
"Aunque le gusta recibir halagos, no permite que le provoquen vanidad excesiva".
Esta acepción se refiere a la acción de elogiar excesivamente a alguien con el fin de obtener su favor o complacerlo. La adulación suele ser una forma de halago interesado que busca obtener beneficios personales a través de la lisonja.
• « Así, todo el tiempo halagaba la vanidad de Treholt; le dijeron que estaba "construyendo puentes" entre Oriente y Occidente. » (de halagar | conjugación)
• « La segregación del Alto Perú es un hecho infausto en la historia de Argentina, motivado no tanto por los deseos de sus habitantes de independizarse sino más bien por la errónea política que ejercieron los gobernantes argentinos hasta el año 1825, en que las antiguas intendencias de La Plata, La Paz, Potosí y Cochabamba se erigieron en un nuevo país que se luego se denominó Bolivia, para halagar al libertador venezolano... »