Mimicría es un fenómeno en el que ciertos animales imitan en color y apariencia a especies peligrosas o desagradables para beneficiarse de su protección. Por ejemplo, insectos inermes imitan a otros venenosos, logrando así engañar a depredadores y evitar ser atacados. Este mecanismo se observa en saltamontes que parecen avispas, hormigas que simulan arañas y mariposas que imitan abejas. Incluso animales inofensivos como el coralillo real pueden adoptar colores y patrones similares a los de serpientes venenosas para disuadir a posibles agresores.
mimicria: animales con colores brillantes ¿por qué?
La relativa inmunidad de que gozan ciertos insectos brillantemente coloreados por su sabor desagradable o su peligrosidad ha sido aprovechada por otras formas afines que no poseen estas características. Estos insectos, suculentos o inermes, imitan en color a los desagradables o peligrosos y posiblemente participan de su inmunidad.
Existen saltamontes que parecen avispas, hormigas que semejan arañas y arañas que se asemejan a hormigas, mariposas que copian a las abejas.
En otro grupo, el inofensivo coralillo real imita superficialmente a la peligrosa serpiente de coral, claramente visible por sus listas rojas, amarillas y negras.