Prolijo/a se refiere a algo completo y detallado, sin omitir aspectos. Describe trabajos minuciosos y exhaustivos que no dejan dudas. También implica abundancia de detalles y precisión en la presentación de información. Se usa para describir algo hecho con esmero y cuidado, prestando atención a la calidad. En cuanto a la escritura, indica legibilidad y orden en textos, facilitando la comprensión del lector. Ejemplos de uso incluyen explicaciones detalladas, trabajos cuidadosos y escritura clara y legible.
Aquí, "prolijo/a" describe algo que se caracteriza por la abundancia de detalles o por la minuciosidad en la descripción o explicación. Esta acepción enfatiza la profundidad y la precisión en la presentación de información.
Ejemplos de uso: "Su explicación fue tan prolija que no quedaron dudas al respecto."
"Prefiero los manuales prolijos que explican paso a paso cómo proceder."
En este sentido, "prolijo/a" se utiliza para describir algo hecho con gran cuidado y atención al detalle. Implica un esfuerzo consciente por hacer bien las cosas, prestando especial atención a la calidad y a la precisión.
Ejemplos de uso: "Su trabajo es siempre prolijo, se nota el esmero que pone en cada tarea."
"Una presentación prolija puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso de un proyecto."
Esta acepción específica se refiere a textos o manuscritos que son claros y fáciles de leer debido a la limpieza y orden en la escritura. "Prolijo/a", en este contexto, destaca la importancia de una buena caligrafía o tipografía para facilitar la comprensión del lector.
Ejemplos de uso: "Agradezco que tu informe sea prolijo; tu letra es muy legible."
"Es importante entregar documentos prolijos para evitar malentendidos o errores de interpretación."
Origen etimológico de prolijo: proviene de la palabra latina prolixus (que significa "extenso")
