Sanar es el acto de recuperar la salud perdida, devolviendo a una persona su bienestar físico y emocional. Puede implicar la intervención de terceros como médicos o sanadores, así como el uso de medicinas o terapias. También se refiere al proceso natural o asistido por el cual un individuo recupera su salud tras haber padecido una enfermedad, lesión o trastorno. En este caso, el sujeto se cura a sí mismo, ya sea de forma espontánea o con ayuda médica.
Aquí, "sanar" se refiere al proceso por el cual una persona o un organismo vuelve a un estado de salud después de haber pasado por una enfermedad, lesión o trastorno.
Este uso del verbo es intransitivo, lo que significa que no requiere de un objeto directo; es decir, el sujeto se cura a sí mismo, ya sea naturalmente, con el tiempo o con ayuda médica.
Este sentido enfatiza la capacidad del cuerpo o del individuo para recuperarse y regresar a su estado normal de salud.
Ejemplos de uso: "Después de varios días en cama y con el tratamiento adecuado, finalmente sané de la neumonía."
"A pesar del pronóstico negativo, el perro sanó sorprendentemente rápido después de la operación."
"El enfermo sanó rápidamente."
Origen etimológico de sanar: proviene de la palabra latina sānō, sānāre, derivado de sānus, sāna, sānum (que significa "sano").