Existe en California una enorme diversidad de suelos; clasificándolos de modo general, podemos decir que la mayor parte de la zona de la Cadena Costera y las tierras altas del NE tienen suelos de marga arcillosa; el Valle Central los tiene predominantemente margosos al E y arcillosos en el centro; y el suelo de Sierra Nevada y de la mayor parte de California meridional es de marga arenosa. Puede hacerse, una división más amplia, entre los suelos predominantemente ácidos de las zonas húmedas y los alcalinos de las más secas.
Clima y topografía variada tienen como consecuencia gran diversidad de plantas y animales. En el extremo sur hay plantas tropicales (acacias, eucaliptos, falsos pimenteros y palmeras); en la zona desértica hay muchas variedades de cactos, mesquites, álamos y algunos ejemplares del raro árbol de Josué; en las faldas de Sierra Nevada existen robles chaparros, yuca, castaños de Indias, amapolas y lupinos. En el centro del estado, a lo largo de la costa, hay anchas fajas de sequoias sempervirens (de 60 a 90 m de altura y 4,5 a 6 m de diámetro), y en las laderas occidentales de Sierra Nevada, sequoias giganteas (de un promedio de 4,5 a 6 m de diámetro, 76 m de altura, y más de 1500 años de edad). La zona septentrional está espesamente poblada con variedades de arce, roble tintóreo, laurel, abeto, pino y cedro y variadas especies de flores y, en particular, lirios y ranúnculos.
Su fauna comprende roedores (ardillas, lepóridos), halcones y lechuzas, en la zona desértica; antílopes, pinzones, palomas, codornices, etc., en las laderas de Sierra Nevada; osos negros, pumas, linces, martas, comadrejas, mofetas, zorros, coyotes, jaguares, marmotas, carcayúes y las aves «spizella socilis» y «sialia árctica», en las zonas montañosas. En la zona alpina, desprovista de árboles, habitan carneros cornilargos.
