m. Aparato que de forma automatizada realiza la tomografía. La tomografía permite el procesamiento de imágenes por secciones y su resultado es el tomograma.
Existen gran variedad de tomógrafos dependiendo del tipo de tomografía y el área en el que se emplea. Usualmente escuchamos hablar de tomógrafos para la medicina, pero son muy empleados también en arqueología, biología, geofísica, ciencia de los materiales, entre otras.
Se llama reconstrucción tomográfica al procedimiento matemático empleado en los tomógrafos.
Los tomógrafos emplean diversos fenómenos físicos para producir las imágenes como los rayos X (TC o tomografía computarizada), rayos gamma (SPECT o tomografía computarizada de emisión monofotónica), aniquilación de electrones y positrones-reacción (PET o tomografía por emisión de positrones), resonancia magnética nuclear (IRM o imagen por resonancia magnética), ultrasonido (ultrasonografía), iones (3d TEM) y electrones (átomo sonda).
En medicina, el tomógrafo es una herramienta invaluable para diagnósticos y tratamientos. Es muy utilizado en la neurología para detectar tumores o lesiones cerebrales, en la cardiología para visualizar el estado vascular del corazón, así como también en muchas otras especialidades de la medicina. Se ha empleado en la detección de enfermedades respiratorias como la COVID-19, brindando a los médicos una mayor información sobre la gravedad del paciente.
Existen diferentes tipos de tomógrafos, pudiendo destacar los de baja, media y alta resolución. Los de baja resolución suelen emplearse para escaneo rápido del cuerpo y de emergencia. Los de media resolución son útiles para la creación de imágenes de órganos internos en tiempo real, mientras que los de alta resolución pueden dar una imagen detallada del estado del tejido.
Cada tipo de tomógrafo tiene ventajas y desventajas únicas; por ejemplo, la tomografía computarizada (TC) puede realizar una detallada imagen tridimensional del cuerpo, pero expone al paciente a una alta dosis de radiación. Por otro lado, la imagen por resonancia magnética (IRM) proporciona una vista más detallada y precisa de los tejidos blandos, pero puede ser más cara y lenta que la TC.
Además, el desarrollo de la tomografía ha revolucionado muchas otras áreas más alla de la medicina. En arqueología, por ejemplo, los tomógrafos permiten explorar el interior de artefactos o monumentos sin dañarlos. En geofísica, permiten analizar la composición del suelo y de materiales geológicos. Por último, en la ciencia de los materiales, los tomógrafos pueden ser utilizados para examinar las propiedades microscópicas y estructurales de los diferentes materiales.
Sin lugar a dudas, el tomógrafo es una herramienta poderosa y versátil, que ha tenido un gran impacto en diversas disciplinas al permitirnos ver más allá de la superficie y obtener imágenes detalladas de nuestro mundo.
Etimología u origen de la palabra tomógrafo: (proviene de la palabra griega tomos que significa cortar, dividir o seccionar, y grafo: aparato que escribe o registra).
• « Utilizando un tomógrafo de emisión de positrones (TEP), se ha podido registrar el funcionamiento cerebral de un adicto, fotografiándose las zonas más activas (aquellas que consumen mayor glucosa), las que aparecen con distinto color. »
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