Definición de conducta involuntaria

conducta involuntaria se refiere a las acciones que realizamos sin pensar o sin querer hacerlo. Puede ocurrir por coincidencia o sin que lo planifiquemos. Por ejemplo, si una pelota se nos cae de las manos y la atrapamos sin pensarlo, eso es una conducta involuntaria casual.



También puede ser intencionada pero irracional, es decir, que sabemos lo que estamos haciendo pero no lo hacemos de manera correcta. Por ejemplo, si decidimos golpear a alguien sin un motivo válido, eso sería una conducta involuntaria intencionada pero irracional.



Algunas conductas involuntarias son instintivas, lo que significa que las hacemos sin pensarlo porque nuestro cuerpo nos impulsa a hacerlo. Por ejemplo, si nos sobresaltamos y cerramos los ojos cuando alguien nos asusta, eso es una conducta instintiva.



La conducta involuntaria también puede ser habitual, lo que significa que ya estamos acostumbrados a hacerla. Por ejemplo, si siempre nos lavamos las manos antes de comer sin pensarlo, eso es una conducta involuntaria habitual.



A veces, hacemos conductas involuntarias sin darnos cuenta de que las estamos haciendo. Esto se llama conducta involuntaria inconsciente. Por ejemplo, si alguien nos hace cosquillas y nos empezamos a reír sin control, eso es una conducta involuntaria inconsciente.



También existe la conducta involuntaria consciente, que es cuando sabemos lo que estamos haciendo pero lo hacemos de manera irracional. Por ejemplo, si sabemos que no debemos comer mucho dulce pero aún así lo hacemos, eso sería una conducta involuntaria consciente pero irracional.



La conducta involuntaria normal es aquella que está aceptada socialmente y se realiza de forma automática. Por ejemplo, saludar a alguien cuando nos lo encontramos en la calle es una conducta involuntaria normal, ya que todos lo hacen y está socialmente aceptado.



Por último, la conducta involuntaria puede ser consciente si la hacemos motivados por lo que los demás piensen de nosotros, ya sea aprobarla o desaprobarla. Por ejemplo, si queremos caer bien a nuestros compañeros de clase y nos esforzamos en ser amables, eso sería una conducta involuntaria consciente.