Dícese de la concertada entre cuatro naciones. En la historia de Europa han sido bastante frecuentes. Recordemos, por ejemplo, la formada por Inglaterra, Francia, Holanda y Austria en 1718 para contrarrestar los designios de España y reforzar los términos del Tratado de Utrecht firmado en 1713 (v. España). En 1815, Rusia, Prusia, Austria y Gran Bretaña concertaron otra para apoyar a los Borbones de Francia contra las pretensiones napoleónicas. Sus partícipes acordaron ocupar Francia y prolongar la alianza tras el periodo de ocupación del país. Las naciones adheridas a ella posteriormente, con excepción de Gran Bretaña, formaron la que se conoció por Santa alianza.