El dribbling es una habilidad utilizada en deportes como el fútbol o el baloncesto, que consiste en regatear a un oponente mediante movimientos rápidos y habilidosos con el balón. En algunos países americanos se le conoce como gambeta. Esta técnica permite al jugador sortear la defensa contraria y avanzar hacia la portería o canasta rival, generando oportunidades de gol o canasta. Es una destreza fundamental para jugadores ofensivos y requiere agilidad, control del balón y visión de juego.