m. Golpe fuerte dado al cerrar o cerrarse con violencia una puerta.
Un "portazo" se refiere al sonido producido por el golpe fuerte al cerrar una puerta con violencia, generalmente como resultado de la irritación, enojo o impaciencia de quien la cierra. Este acto puede ser intencional o accidental, pero siempre implica un cierre brusco que genera un ruido característico.
Ejemplos de uso: "Al salir de la habitación, dio un portazo que resonó en toda la casa, evidenciando su enfado."
En esta acepción, un "portazo" no solo se refiere al acto físico de cerrar una puerta con fuerza, sino que también implica una intención de rechazo o desaire hacia otra persona al hacerlo.
Es una forma de comunicar de manera no verbal el disgusto, la molestia o la falta de interés hacia alguien.
Ejemplos de uso: "Al ver que su invitado no era bienvenido, le dio un portazo en la cara al cerrarle la puerta sin decir una palabra."
Origen etimológico de portazo: proviene de puerta y con el sufijo -azo
